Llisus Craist y sus reliquias

Las reliquias cristianas son los restos de los santos después de su muerte. Aunque también se utiliza el término para designar a los ropajes y objetos que pudieran haber pertenecido al santo o haber estado en contacto con él, llamadas «reliquias por contacto».

El padre Ignacio Acuña Duarte dijo, en el tono ofensivo que caracteriza a todo párroco que se precie, «Para un mundo que sólo ve con ojos de la carne, la constatación de la existencia de los preciosos testimonios del Divino Holocausto son elocuentes amonestaciones contra sus corazones endurecidos por el pecado». Divino Holocausto. ¡Divino Holocausto gente!

En catholic.net dicen que «La ciencia se empeña en desmitificar la tradición y la fe, confundiendo con fraudes y engaños a los fieles poco instruidos con sensacionalismo barato. La prensa corre con gran parte de la responsabilidad al difundir semejantes sandeces y medias verdades».

Relicario del brazo de San Jorge. Catedral de Valencia

Pisa morena , pisa con garbo, que un relicario,
que un relicario me voy a hacer…

Pues bien, como portavoces de los ojos de la carne y de la carne con ojos, vamos a demostrarles que somos dignos representantes de ese sensacionalismo barato que mencionan, y a resumiros el HALL OF FAME de las reliquias cristianas:

  • Santo prepucio: Jesucristo fue circuncidado por el rito judío, y varios sitios se pelean diciendo que ellos tienen la reliquia en cuestión. O alguien miente, o alguien estaba muy bien dotado. En cuanto a pellejo al menos. Lo mejor del asunto es que, como Jesucristo (supuestamente) resucitó al tercer día, es el único cachito de su cuerpo que queda. Otras reliquias relacionadas serían los cuchillos que se utilizaron para circuncidarlo, que hay varios. Lógico: varios prepucios, varios cuchillos. Normal. Espera, no.
Circuncisión de Jesús, Friedrich Herlin, 1466.

Ouch!

  • Santa sangre: todo el mundo parece tener parte de la sangre que derramó Cristo el día de la Pasión. No me extraña que no sobreviviese.
  • Santo ombligo o Santo cordón umbilical de nuestro Señor Jesucristo. De este hay 3 ejemplares: en Santamaría de Popolo,  en San Martíno y en Chalons.
  • Cola del asno que llevó a Jesús a sus lomos. No comment.
  • Dedos de San Juan Bautista. Concretamente 60 dedos. Está feo señalar, pero de nuevo aquí alguien miente.
  • Santa Diestra del rey San Esteban I de Hungría: no podía ser la izquierda, no.
  • Los dos brazos de Santa Tecla. Pobre mujer, con razón es Santa, y suponemos que mártir. Hay muchos más brazos de otros santos rondando por ahí, aunque unidades sueltas. Del par completo solo conocemos este caso.
  • Trocito de cuero cabelludo de Santa Águeda. Hay también de María Magdalena y de otras que se fueron al más allá trasquiladas.
  • Leche y lágrimas de Santa María Virgen. La dejaron seca porque, suponemos que en aras de recoger muestras para un futuro CSI Vaticano, hay lágrimas y leche en París, Roma, etc.

Sugerencia: arrejuntar todas las reliquias, empaquetarlas en el santo sudario y crear un leviatán cristiano.

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